Bogotá 25 de octubre de 2022. "Nosotros como pueblo Kankuamo debemos enviar un mensaje a todo el país, y hablar de nuestra ley de origen", afirma Yonder Mindiola, sabedor y mayor indígena de la comunidad Kankuama de Atánquez (Cesar).
"Sanar a tráves de nuestra imagen" es una exposición que busca reparar y sanar simbólicamente a través de una serie de fotografías, capturadas por "El Mochilón de la Sierra", colectivo audiovisual fundado hace ocho años en Atánquez (Cesar), capital del pueblo indígena Kankuamo, en la Sierra Nevada de Santa Marta.
La exposición presenta tres ejes temáticos: "El ser kankuamo", "Resistencia indígena kankuama en el marco del conflicto armado" y "Reconstrucción y aporte de la memoria histórica kankuama". Estos ejes se ven representados por la mochila, en los tejidos, formas y colores, donde se tejen las costumbres y pensamientos de uno de los cuatro pueblos protectores de la Sierra (kankuamos, wiwas, arhuacos, koguis) y su relevancia en la comunidad, en compañía del poporo, un instrumento de mambeo ancestral que dialogan sobre el riesgo de desaparición que enfrentan a raíz del conflicto armado.
El pueblo Kankuamo hace parte de la gran familia Tayrona en la Sierra Nevada de Santa Marta (SNSM), se encuentra ubicado en la municipalidad de Valledupar y se extiende en 12 comunidades, siendo Atánquez su capital, con más de 17.000 habitantes. La hermandad de los pueblos de la Sierra, Arahuacos, Koguis, Wiwas y Kankuamos, se narra así misma como los guardianes de la Sierra y sus tres pueblos hermanos son guardianes de la tradición y la sabiduría.
"Nuestras historias familiares como hijas e hijos de sobrevivientes representan los conocimientos kankuamos ancestrales, los cuales debemos preservar desde nuestro rol de jóvenes pertenecientes a una comunidad. Estas imágenes también representan historias y narraciones de un pueblo que sobrevivió y resistió al conflicto armado colombiano", comentan los integrantes del colectivo "El Mochilón de la Sierra".
A tráves de esta exposición los integrantes del colectivo buscan recuperar los lugares sagrados de pagamento y conocimiento asociados a las siembras, medicinas tradicionales y curas espirituales. "Revela el rol de los jóvenes kankuamos como protectores de la Ley de Origen, ya que persisten y honran a sus ancestros –o como se les llamaba desde tiempos antiguos, los Sixquiyani–. Los jóvenes son quienes portan y difunden la palabra de fuego; la caminan, la viajan y la endulzan".
"Esta propuesta fotográfica recupera y reivindica los testimonios, pensamientos, palabra, y saberes que el conflicto armado ha querido sepultar. Es una forma de mostrar los rostros y la dignidad del pueblo Kankuamo, que contribuyen a la consolidación de las memorias plurales por las que trabajamos desde el Centro Nacional de Memoria Histórica. Les invitamos a asistir a esta exposición para reflexionar sobre la tradición kankuama, y su compromiso en la construcción de paz en Colombia", Ana María Trujillo, directora (e) del CNMH.
La alianza del Museo de la Independencia Casa del Florero con el Centro Nacional de Memoria Histórica para la exhibición de este valioso trabajo fotográfico realizado por el colectivo Mochilón de la Sierra con la comunidad Kankuama responde al lineamiento del Ministerio de Cultura de "fomentar la construcción de paz, mediante acciones de reparación cultural y simbólica de poblaciones afectadas por el conflicto a través de procesos de creación artística y del fortalecimiento de saberes". "Desde el Museo de la Independencia Casa del Florero, se desarrollarán acciones de comunicación educativa con los públicos alrededor de la exposición Sanar a través de nuestra imagen, orientadas a promover el reconocimiento de los saberes y memorias del pueblo kankuamo y la valoración de la diversidad de sus voces y memorias que nos permitan construir colectivamente nuevos relatos de una nación incluyente", Elvira Pinzón Méndez, directora del museo.
Una muestra tejida desde el ser y la resistencia
Según datos del Observatorio de Memoria y Conflicto del CNMH, contra los cuatro pueblos hermanos de la Sierra Nevada de Santa Marta, desde 1955 hasta 2022, con corte al 31 de marzo de este año, se presentaron los siguientes hechos de violencia: 68 personas desaparecidas forzosamente; 13 secuestradas; 358 asesinadas selectivamente; 54 masacres; 16 víctimas de violencia sexual; y 37 menores reclutados y utilizados en la guerra. Los kankuamos y los wiwas han sido los más afectados por la violencia, al estar en la parte baja de la Sierra.
Para el desarrollo de esta exposición, un grupo de profesionales del CNMH y del colectivo "El Mochilón de la Sierra" trabajaron conjuntamente durante 12 meses, a través del diálogos y concertaciones con los miembros del pueblo Kankuamo.
"Fue el colectivo quien determinó la construcción conceptual y producción de la exposición, sus postales han bajado del corazón de la Sierra Nevada para compartir con el país su mensaje: el de un pueblo que sobrevive y cree en la paz". Daniel Sarmiento, profesional del CNMH que acompañó el desarrollo de la exposición.
Los colectivos de jóvenes líderes reivindican su identidad desde la ley de origen, la cual se puede resumir como la ciencia tradicional de la sabiduría y el conocimiento ancestral, un conjunto de creencias para relacionarnos con la madre tierra a través de la armonía y el equilibrio entre el mundo material y espiritual. La ley de origen nos orienta hacia un buen vivir a través de ser guardianes del corazón del mundo.